martes, 15 de diciembre de 2015
No todos tenemos los mismos gustos, pero... al ver sus ojos azules y ¡qué ojos! Tan azules como el mar del Caribe. Aquella clavícula deliciosa, cadavérica para algunos pero cautivante para mí. No sabía qué escuchar pero decidí poner la primera canción que estaba en la página principal de mi canal de Youtube. Qué deliciosa mujer, tan gélida a vista lejana pero con una voz cálida de cerca y sí, porque aunque estés sentado en tu sofá y la escuchas cantar parece como si estuviera cantándote al oído. Sus labios casi transparentes sólo te hacen desearla más. No importa el desorden de sus cabellos, se ve tan frágil pero tan decidida a la vez que muestra una fortaleza que yo no me resisto. Pareciera que baila con el aire o como si te fueras a perder entre sus piernas. Fiona, tómame... con esos pulpos en tu cabeza o con esos caracoles puestos uno por uno sobre tu terso cuerpo. También lucho con mi cerebro y mis pensamientos cada noche, a veces quisiera dispararme al cerebro y dejar de sentir... y morirme escuchándote. Pero también desearía fumarme un poco de la verde y disfrutar de la sensación. Pero vamos, que esto es sobre ti y no sobre mis desórdenes mentales. F I O N A.
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