domingo, 14 de noviembre de 2010
El lema lo decía todo, muchas personas acudieron al llamado, quizá la gran mayoría se entero del evento mediante el Facebook, página social altamente conocida entre los jóvenes y al parecer entre los no tan jóvenes, el interés fue general y la presencia fue por momentos abrumadora y hasta sorpresiva. Desde todas partes de la ciudad, personas acudían con sus mascotas, como abanderadas para animar la caminata, entre vítores, silbidos, panfletos, pancartas, en fin la parafernalia estuvo acorde con el momento y el ambiente que se transpiro ese día, fue realmente acogedor.
Son las 3pm, el cielo es profundamente gris, pero el bochorno es evidente, el sol yacía, tras las nubes esperando su momento y el Ovalo “Naciones Unidas” ubicado entre la Av. Faucett y la cuadra 33 de la Av. La Marina fue mudo testigo de la concentración de las personas, el semblante de gran parte de los asistentes fue de entusiasmo, algarabía y por momentos euforia colectiva, se denotaba que la expectativa fue muy grande y al parecer, el solo hecho de ser participes de la marcha, hizo que el esfuerzo de muchos fuera recompensado. Cuando la multitud creció en número, la expectativa por dar inicio a la marcha, fue aún mayor, la espera desespera dicen algunos, y es totalmente cierto, las mascotas inquietas, olisqueaban a sus pares y a los demás asistentes, los ladridos, los jadeos, todo hizo eco máximo en el ambiente. Los organizadores, a través de un pequeño megáfono, daban indicaciones a las personas y las desorientadas mascotas se perdían entre el bullicio y el calor.
Son aproximadamente las 3:40pm, y se da inicio a la marcha, el serenazgo de San Miguel, fue la mejor y más idónea escolta para todos, el tránsito de personas y animales se realiza con suma tranquilidad, no hay desbandes, no hay anarquía, todos se comportan alturadamente, un grupo de señoras, bonachonas todas ellas, reparten panfletos a los sorprendidos transeúntes, que se ubican a un costado, enmudecidos, sorprendidos con tamaño espectáculo callejero que se viene armando, algunas mascotas intrépidas, asumen la mejor de sus posiciones, como si supieran que la caminata que se realiza en ese momento, es por ellos, algunas caminan con garbo y elegancia, otras solo caminan por inercia, siguiendo fielmente a sus poseedores, mientras una pequeña minoría no tiene la menor idea de el por qué de tanto alboroto.
La ruta se inicia en la vía auxiliar de Av. Faucett en la cuadra 1, hasta llegar a la cuadra 7 de la Av. Precursores, continua por el carril derecho de la Av. Precursores, donde la multitud cruza la cuadra 8 de la Av. Rafael Escardó hasta llegar al Parque de las Leyendas, el cielo se despega y el sol está en su total apogeo, luego ingresan a la prolongación La Mar, frente al Colegio Claretiano hasta la cuadra 7 de la Av. Monseñor Jorge Dintilhac, continúan todos por la Av. Monseñor Jorge Dintilhac hasta llegar al cruce con la calle Monseñor Fidel Turbino, finalmente la muchedumbre llega a su destino, el estrado ha sido construido al lado del parque Juan Pablo II, el equipo de sonido los recibe con fuerza y una serie de vistosos personajillos se avistan en el escenario.
Entre tantas personas adquieren vistosa notoriedad: el alcalde de San Miguel Salvador Heresi, la joven y hermosa Nicole Pillman, Cucho Galarza de la banda Río, Chachi Luján y Orlando Bells quien es un cantautor peruano, los integrantes del grupo cultural “La Revolución de la Cuchara” entre otros. El también postulante a la reelección de la alcaldía de San Miguel, tomo el micrófono y saludó la enorme acogida que tuvo la marcha, además de señalar que al lado de su querida mascota “Tyson” participo también en la caminata. Destaco el esfuerzo de muchas personas que se encargaron de organizar el evento y se sintió humildemente agradecido de ser partícipe de este pequeño pero significativo evento. A continuación Nicole Pillman, quien participo hace ya un tiempo en el reallity “Latin American Idol” y donde consiguió mayor notoriedad, destaco el hecho de poder participar y agradeció la invitación.
Se suceden uno a uno los relatos de diversas personas, que dan testimonios, algunos alentadores otros tristes, pero todos encuentran una respuesta en la multitud que los acoge como muy personales y contagian el ambiente de buena vibra y excelente animo. Mientras tanto muchas personas y mascotas siguen colmando los alrededores del estrado que se armo para el evento, alertadas por los estruendosos amplificadores o tal vez porque también se armo una carpa de asistencia gratuita para atender a las mascotas, en fin, el ambiente es óptimo verdaderamente.
Son casi las 6:10pm y el evento está llegando a su fin, pero una grata sorpresa se anuncia por los amplificadores, al término del evento, diversos grupos de los ochentas ofrecerán un concierto, coronando un excelente día, que para muchos, solo fue el inicio de algo mucho más grande, para otro tan solo inolvidable. ¿Cuánto podemos hacer con un poco de atención? Mucho. Eso quedo demostrado y esperemos que sea la chispa que incendie una fogata mucho más grande que erradique definitivamente el maltrato animal.
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